Las redes de interproveedores están formadas por empresarios jurídicamente independientes de la empresa principal a la cual proveen de bienes o servicios, pero económicamente interdependientes de la misma como resultado de la integración en su ciclo productivo. En consecuencia, dicho modelo económico-organizativo diferenciado requiere el diseño de un marco normativo adecuado que permita cohonestar la necesidad de seguridad jurídica de los miembros de la red, con la dinamicidad, flexibilidad y capacidad de adaptación al mercado que requieren dichas estructuras para maximizar los beneficios derivados de las sinergias entre sus miembros. |