Las instituciones europeas han tomado el liderazgo mundial en la regulación de los avances informáticos dada la importancia que va a tener en el desarrollo económico en el siglo XXI. Los programas de mercado único digital europeo, de las políticas de datos abiertos y la reciente decisión del Parlamento Europeo de la creación de una personalidad electrónica para los robots hacen que la revolución económica aparejada a su uso no sólo sirva para el desarrollo económico sino también para su regulación normativa. |